martes, 7 de octubre de 2008

la historia de los jardines zen

Los primeros indicios de Jardines Japoneses surgieron en el período Nara (710-794 d.c.) dentro del Palacio Imperial. El nacimiento del "Jardín Zen" esta basado en la necesidad de crear un espacio que fuese utilizado como una ayuda para la meditación. Durante este período, las parcelas de tierra fueron pequeñas y sus estanques diseñados a una escala menor. Es por ello, que para inducir la sensación de grandes ambientes en espacios pequeños se requirió representar el paisaje natural mediante la combinación monocromática de todos sus elementos. Como resultado nació el jardín Zen tipo "escenario," el cual fue más sofisticado con la incorporación de intrincadas líneas costeras en las orillas de sus estanques y mediante el uso de rocas en varias formas.

Luego, durante el período Muromachi (1392-1573) el zen se popularizó entre los Samurai como una disciplina necesaria para realizar la acción correcta en momentos difíciles. El jardín tipo "paisaje seco" (kare-sansui), realizado con rocas y arena en estrechos espacios ubicados frente a los cuartos de meditación comenzó a aparecer en los Templos. Sin el uso de agua, la arena y las rocas simularon su presencia en forma de ríos o ambientes oceánicos.

En el jardín japonés se expresa espiritualidad, en el sentido de que en él no hay riqueza material, sino la pureza de cosas simples y austeras. Los elementos son sólo objetos naturales y que mediante su perfecta colocación hacen que el jardín se convierta en una obra para la contemplación.

Estos pequeños Jardines Zen animan a crear o simplemente, a jugar. Nos permiten reflejar nuestros sentimientos más profundos mediante el diseño y los modelos que podemos dibujar. Nos aportaran calma, harán volar la mente, refrescarán nuestra alma y nos acercarán a la realidad de nuestra naturaleza más secreta. Para los japoneses es un instrumento de meditación y relajación mientras que en Occidente se considera una buena alternativa de antídoto contra el estrés de la vida moderna.

Permiten dar descanso a nuestra mente, focalizando nuestras preocupaciones en un solo punto. Tranquilizando la ansiedad, la angustia y los miedos.

No hay comentarios: